Cuando ya nadie lo esperaba, por fin un testimonio fuera del guión. Tomás Tenza, el exgerente del
HUBU, desmiente la imagen idílica de lo que allí ha sucedido. Una postura honesta de alguien
poco sospechoso de ser uno de esos revoltosos miembros de la Plataforma.
Uno de los primeros actores del proceso, con una sinceridad desacostumbrada en esta Comisión, habla de
lo que conoce de primera mano: enfrentamientos, incumplimientos, conflicto de intereses
hasta la pelea, obras que se hacen sin permisos ni sustento documental, proyecto
completamente inaceptable, planes de equipamiento hechos sin el más mínimo rigor,
chapuzas por doquier.
Deja claro que muchas decisiones transcendentes se tomaban fuera de los órganos de control del proyecto, entre muy altas instancias políticas y los constructores. Nada, desgraciadamente, demasiado nuevo en el mundo de la relación de lo público con lo privado.
Pero el final ha resultado un edificio de pésima calidad a precio de oro que pagan los ciudadanos por las decisiones, al menos equivocadas, de los políticos de la Junta. Esto no puede quedar así.
Aquí hay muchas cosas que no sabemos y tenemos derecho a saber. Hay responsabilidades y responsables.
Deja claro que muchas decisiones transcendentes se tomaban fuera de los órganos de control del proyecto, entre muy altas instancias políticas y los constructores. Nada, desgraciadamente, demasiado nuevo en el mundo de la relación de lo público con lo privado.
Pero el final ha resultado un edificio de pésima calidad a precio de oro que pagan los ciudadanos por las decisiones, al menos equivocadas, de los políticos de la Junta. Esto no puede quedar así.
Aquí hay muchas cosas que no sabemos y tenemos derecho a saber. Hay responsabilidades y responsables.
Referencias en prensa:
- El Diario.es | La Junta de Castilla y León aprobó el proyecto del Hospital de Burgos con defectos que impedían su apertura
- El Correo de Burgos | Tenza desvela «cambios no autorizados» y «tensiones»
- 20minutos.es | Exgerente del General Yagüe dice sobre el HUBU que en marzo de 2011 no había nada que entregar y se pidieron sanciones